Finca situada en el corazón de la isla con magníficas vistas a los campos de cultivo. A 2 km de la villa de Porreras, a 30 km de la Palma, la capital y a 20 km de la todavía playas vírigenes de Mallorca. La finca, tipificada como ecológica, está dedicada a la explotación agrícola y ganadera. Rodeada de algarrobos, higueras, chumberas y almendros, se asienta en una pequeña colina de tierras fértiles en la que predomina el cultivo de cereales y los sucros rojos de los viñedos que producen un vino excelente. La casa es una antigua casa payesa cuya antigüedad se remonta al siglo XVII, conservando íntegramente las estructuras y las características centenarias. Ha sido cuidadosamente rehabilitada respetando y recuperando todos los elementos arquitectónicos originales utilizando materiales tradicionales y ecológicos. Contrasta con una decoración refinada y cálida que conserva el encanto de las típicas casas rurales mallorquinasa. La casa integra armónicamente la comodidad de las modernas instalaciones con el antaño mundo de foravila.
PROPIETARIOS: Carlos y Fdco. Javier Feliu Román
DIRECCIÓN: Finca Son Dagueta, Camí de sa Serra s/n
aptdo. Correos nº15
07260 Porreres (Mallorca)
TELEFONO: 609 613 213
E-MAIL: info_arroba_canfeliu.es
WEB: www.canfeliu.es
Abierto todo el año
IDIOMA: Español, catalán, inglés y alemán
PRECIO/NOCHE: Precio por persona y noche: 60 € - 80 € Desayunos incluidos IVA no incluido 10% de descuento para los estudiantes
Un área de recepción, un comedor abovedado con vigas de madera, un salón con chimenea, barbacoa, la bodega, una gran zona de piscina y un pequeño lago acaban de configurar todo el conjunto. Impera un belleza primitiva que todo lo llena. Los muebles básicos de artesano, el hierro forjado, las telas tejidas a mano o el color tierra que se funde con el paisaje. La fachada está coloreada con tierras de la zona
En cuanto a servicios, el desayuno, como aquellos de antaño que vale la pena disfrutarlo sin prisa intentando que no se acabe nunca, en una atmósfera clara, relajada y tranquila. Unas bicicletas para quienes tengan mala conciencia después del festín, están a disposición de nuestros clientes, así como la participación en las tareas agrícolas (producción de alimentos ecológicos) o el aprendizaje de las mismas, si así lo desean.
Los niños también encuentran aquí su espacio. Una pequeña y divertida mansión se esconde entre el follaje próximo a la casa. Lugar de juegos y fantasías de ese enigmático y creador mundo de los niños.
Ofrece ocho habitaciones de alto confort, una Suite con jacuzzi, cuatro Junior Suite, dos dobles y una individual, todas ellas adecuadas con baño o ducha, lavabos encastrados en muebles de maderas nobles, calefacción y TV, con personalidad distinta cada una de ellas y con terraza exclusiva.
La finca es un verdadero refugio para vivir en libertad con la compañia de las nubes, los naranjos, el sol, las avestruces, los caballos, los amigos...
El espacio ajardinado se despliega entre terrazas y caminos serpenteantes en un bosque de chumberas. Un nuevo ecologismo, una forma de buscar el jardín a través de las plantas autóctonas.